La UDI y plebiscito por pena de muerte: 3 momentos en que la derecha se negó a hacer una consulta ciudadana
A pesar de que la pena de muerte fue derogada en Chile en 2001, por estos días, 17 años y tres gobiernos después, en la discusión pública nuevamente se ha vuelto a hablar sobre si se debería echar pie atrás en el tema o no.
Entre los episodios más polémicos recientes está la carta que un grupo de cinco parlamentarios de la UDI escribió al presidente electo, Sebastián Piñera, pidiéndole que durante su mandato realice un plebiscito para consultar sobre la reposición de la pena de muerte en el país, motivados por la indignación y el impacto que generó en la opinión pública la brutal muerte de Sophie, la menor de un año y once meses que vivía en Puerto Montt, debido a las agresiones y abusos causados su padre biológico.
El texto, firmado por los reconocidos pinochetistas Osvaldo Urrutia, Ignacio Urrutia, Celso Morales y Pedro Álvarez-Salamanca, junto al recién electo Sergio Bobadilla, aboga por "una consulta no vinculante" que esté "restringida a los delitos de extrema gravedad". “Hay seres humanos que no merecen ser alimentados y encarcelados, porque la maldad y nulo respeto a la vida no permiten otra opción que la de pagar con su vida los atroces delitos cometidos. La pena de muerte y su reposición es un concepto que debe ser discutido por los chilenos", dice el documento.
El asunto ha sido consultado con abogados especialistas en Derecho Penal, quienes han recalcado que, desde el punto legal, lo anterior no es posible. "Los países que han abolido la pena de muerte no pueden volver a instaurarla, según el artículo 4 del Pacto de San José, al que Chile suscribió”, explicó a El Desconcierto el abogado y académico de la Universidad de Chile Jaime Winter, quien agregó que, si se siguiera adelante, “además del repudio de la comunidad internacional, Chile se vería expuesto a una serie de sanciones de la Corte Interamericana de Derechos Humanos”.
Aún así, los parlamentarios manifestaron en su texto que "si en Chile se puede o no reponer la pena de muerte es una decisión que es controvertida y los que niegan su reposición son básicamente abogados y ONG liderados por la izquierda chilena".
De este modo, además de reducir la discusión a un eje derecha-izquierda, la propuesta resulta llamativa debido a que es precisamente Chile Vamos, el bloque al que pertenecen los parlamentarios que la impulsan, desde donde ha surgido la oposición y descrédito por las iniciativas de plebiscitos que se han realizado durante el último tiempo, o que contemplen la participación ciudadana, y El Desconcierto recuerda tres de ellas.
1. "Plebiscito por la Educación"
Era 2011 y el tema que marcó ese año fue, sin duda, la discusión sobre la educación en Chile. Y en medio del debate y la relevancia que adquirió el movimiento estudiantil, el Colegio de Profesores, y figuras como Camila Vallejo y Giorgio Jackson, surgió la Mesa Social por la Educación Pública, que estaba integrada por distintos actores vinculados al área, y que decidió impulsar el "Plebiscito por la Educación", que consultaba a la ciudadanía por aspectos como la desmunicipalización y lucro en educación.
La iniciativa contó con más de un millón de personas que votaron, sin embargo, fue desacreditada por figuras de Chile Vamos. Una muestra fueron las declaraciones del entonces vocero de gobierno, Andrés Chadwick (UDI), quien dijo que la consulta "ni siquiera alcanza a constituir una presión" para la administración y que "es sólo una acción de un grupo gremial que ha decidido consultar a las personas en términos informales".
Aún más tajante fue el entonces secretario general del partido y actual senador, Víctor Pérez, quien dijo que "un país serio no puede gobernarse por plebiscitos que no tienen ningún tipo de reglamento que garantice sus resultados", y agregó que "en Chile tenemos una democracia representativa, donde la voz de la ciudadanía se expresa en las instancias establecidas".
En la oportunidad agregó que acciones como esa "no ayudan a resolver los problemas de fondo y, por el contrario, lo que buscan es continuar entrabando la búsqueda de soluciones verdaderas" al conflicto educacional.
2. No+AFP
Similar a la anterior fue la iniciativa impulsada por la Coordinadora "No+AFP", que en octubre pasado realizó una consulta ciudadana para conocer la postura de la ciudadanía ante el actual sistema de pensiones, y en la que participaron cerca de un millón de chilenos.
Por esos días, la campaña presidencial estaba en pleno desarrollo y el abanderado de Chile Vamos, Sebastián Piñera, consultado sobre el tema, le quitó credibilidad al proceso.
"En Cuba hacen plebiscitos en que el 99,9% se inclina por los hermanos Castro”, dijo, y agregó que no le creía “nada, ni una palabra” a dicho movimiento.
3. Asamblea Constituyente
Una de las primeras determinaciones de Chile Vamos luego del triunfo de Sebastián Piñera fue aplicar la "retroexcavadora" a algunos proyectos emblemáticos de la administración Bachelet, como la reforma a la Constitución, que empezó el proceso constituyente con la organización de numerosos encuentros locales.
El propósito es modificar el capítulo XV, para establecer que se permita cambiar la Carta Fundamental por completo, y luego proponer un mecanismo para crear una nueva, como por ejemplo, a través de una Asamblea Constituyente. Dicho mecanismo, eso sí, debe ser aprobado por 2/3 de los diputados y senadores en ejercicio.
Es conocida la oposición del conglomerado a la modificación de la actual Constitución, que fue redactada en dictadura y cuyo principal ideólogo es Jaime Guzmán. De hecho, durante el proceso que contempló los encuentros locales, desde el conglomerado se dividieron, y algunos optaron por no participar, ya que consideraron que sí lo hacían, estarían legitimando una Constitución “chavista”, entre los que se encontraba principalmente la UDI y la Fundación Jaime Guzmán.
Por otra parte, la posición de Evópoli y ciertos sectores de Renovación Nacional –ligados al senador Manuel José Ossandón– declararon que no se restarán del proceso, pero para no cederle espacio a la centro izquierda.