Si estás embarazada debes evitar el estrés fetal a causa del calor con estos 4 consejos de especialistas
Debido a las altas temperaturas las probabilidades de sufrir un golpe de calor aumentan y quienes más propensas a se encuentra frente a este problema son las mujeres embarazadas ya que el feto se expone a una situación de estrés.
El aumento de la progesterona, que a su vez aumenta la temperatura corporal, como también el incremento del volumen sanguíneo y los cambios en la circulación son factores fisiológicos y hormonales que experimentan las embarazas.
Estos factores vuelven más propensas a las embarazadas a experimentar un golpe de calor, que es cuando "el cuerpo no puede regularizar su temperatura adecuadamente" y en consecuencia, expone la vida del feto, explicó Morin Chaparro, académica de la carrera de Obstetricia de la Universidad Andrés Bello, sede Concepción.
Los principales síntomas base que siente una persona que sufre un golpe de calor son "temperatura corporal superior a los 39ºC, piel roja, caliente y usualmente seca, fuerte dolor de cabeza, mareos, dolor de estómago, estado de confusión y pérdida de conciencia".
En el caso de las embarazadas, pueden presentar además "calambres musculares, dolores de cabeza, mareos y una disminución en el volumen de líquido amniótico” debido a la deshidratación causando estrés fetal, indica la profesional.
En estos casos, aumenta la presión arterial, complicando la circulación sanguínea y, en consecuencia, la mujer embarazada podría desarrollar preeclampsia, una afección en la que se reduce el suministro de sangre al feto.
En tanto, la persona embarazada podría sufrir afecciones cardiovasculares.
Retomando las consecuencias en el feto, la exposición al calor aumenta "el riesgo de parto prematuro o de bajo peso al nacer".
La etapa del embarazo en que más puede verse afectado el feto es en el primer y tercer trimestre, asegura Chaparro.
¿Cómo evitar el estrés fetal por golpe de calor?
La académica Morin Chaparro recomienda al menos 5 acciones que ayudan a prevenir que la embarazada sufra un golpe de calor y garantice la protección del feto.
Estas son mantenerse hidratada constantemente, ya sea tomando agua o alimentos que lo contengan y evitando, por el contrario, consumir bebidas deshidratantes y cafeína.
En cuanto a la vestimenta, la especialista sugiere usar ropa ligera, transpirable y de colores, que permita a la mujer sentirse cómoda.
Por supuesto, se recomienda evitar la exposición al sol y tomar descansos en ambientes frescos, así como duchas con agua tibia.
Finalmente, sugiere evitar realizar ejercicio intenso especialmente durante las horas donde la temperatura alcanza su peak.
Mantente hidratada
Para evitar el estrés fetal a causa de la deshidratación por un golpe de calor, el académico de la Facultad de Enfermería de la Universidad Andrés Bello, Juan Videla, indica una serie de líquidos que son una buena opción para mantenerse hidratados.
Por ejemplo, además de tomar agua se recomienda recomienda beber infusiones. Otra opción es preparar aguas saborizadas con frutas, pero sin agregarle azúcar.
Claramente se recomienda evitar las bebidas alcohólicas "como la cerveza, que aumentan la eliminación de líquidos".
En la misma línea, se debe evitar el consumo de bebidas azucaradas y el café "debido a su efecto diurético".
En cuanto a las bebidas isotónicas, se recomienda su consumo solo a quienes realicen ejercicio intenso y recurrente.