55% cree que Caso Hermosilla quedará impune: Síntoma es revelador de "decadencia absoluta"
Este miércoles 2 de octubre, se oficializaron los resultados de la última encuesta Data Influye, sondeo que apelando a una muestra de 1.209 personas, entrega antecedentes respecto del impacto que ha tenido en la ciudadanía el modus operandi del abogado Luis Hermosilla, actualmente en prisión preventiva en Capitán Yáber, mientras está siendo investigado por la presunta comisión de cohecho, lavado de activos y delitos tributarios.
Específicamente, en relación al "desenlace del caso Audios/Hermosilla, 55% considera que solo generará 'ruido' y acusaciones que después no progresarán, quedando impune", detalla el trabajo recopilatorio.
Siguiendo con este tema, el reporte de prensa del levantamiento de información revela que "23% cree que habrá algo de justicia en los casos más graves".
Y en cuanto a "las instituciones más afectadas por este caso de corrupción, son el Poder Judicial (38%), la oposición de derecha (21%) y, en menor medida, el gobierno (8%)".
Para Axel Callis, director de Tú Influyes, responsable de la encuesta, las apreciaciones de la gente al respecto, son totalmente coherentes con “todos los estudios que se vienen haciendo en Chile desde hace años de la altísima percepción de impunidad que existe hacia el funcionamiento de la justicia”.
"Todo lo que tiene que ver con justicia es multidimensional, porque no solamente es esta alta percepción de impunidad, de que nadie va a la cárcel, o los que van son quienes no tienen capacidad de defenderse, tenemos un problema no sólo en términos de tratamiento", destaca.
Impacto en la crisis de confianza
Por otra parte, agrega, (está) "lo que sacamos en el estudio anterior, que 85% de las personas pensaban que no hay igualdad ante la ley, entonces no sólo tenemos un problema de funcionamiento de la justicia en términos penales, sino también en términos de tratamiento, de administración".
“Entonces, esto es claramente muy contributivo a la crisis de confianza que hay en Chile en todas las líneas", estamos en "una sociedad donde el contrato social base, aquellos que todos establecemos inconscientemente al nacer, de dar deberes y recibir derechos, no se está cumpliendo, por lo tanto, la posibilidad que tiene Chile de progresar, se hace muy cuesta arriba cuando esto no está funcionando”, agrega.
Lo que, complementa, "tiene que mucho que ver con la realidad, porque cuando el contrato social no funciona, cuando hay sensación de impunidad y la administración de justicia es desigual, la anomia se desboca, las personas comienzan a delinquir, saltarse las normas... estamos hablando de normas básicas, desde saltarse una luz roja o no andar por la berma, hasta sentir que hay mayores condiciones para que el crimen organizado se despliegue”.
"Esto es decadencia absoluta, es el no Estado, es México", dice entregando un lapidario diagnóstico".
Y lo peor, enfatiza, "es que las respuestas que se dan son del tipo ‘autotutela’, o sea, cuando los sistemas de justicia no operan, aparecen dos caminos, la ‘autotutela’, donde las personas se empiezan a hacer justicia por sí mismas o se empieza a pedirle a Dios que resuelva mágicamente temas en otra vida".
"O sea, hay como una desesperanza dentro de la ciudadanía”, revela a renglón seguido.
“Es terrible"
Una sintomatología que Callís dice, “es terrible, porque la percepción que hay desde hace mucho tiempo, es que esta desigualdad opera mucho más fuerte en los grupos poderosos, y eso está en esta encuesta y en las anteriores”.
Lo que, en su opinión, “es importante, porque las personas que están a cargo de los poderes del Estado, no tienen conciencia de las implicancias prácticas que tiene esto, que son súper sencillas”.
“Cuando hay una anomia extendida, las personas no denuncian los delitos o se pierde la capacidad de asombro ante delitos más graves y se consolida algo que es terrible para mucha gente, que son las incivilidades, la incapacidad que tienen los vecinos de convivir con otras personas”, asevera.
Porque, dice luego, "llaman a Carabineros, Carabineros no llega y los guardias municipales no pueden administrar conflictos de estos espacios privados, es una degradación tremenda”.
“Y para tener autotutela, tú tienes que tener armas, si vas a autodefenderte, tienes que tener tráfico de armas, y el tráfico de armas a la alarga a quien beneficia es a los delincuentes, porque los que se roban las armas son los delincuentes".
Y en definitiva, concluye, estamos frente a una situación "de la que no sé si la Corte Suprema y el Ministerio Público tengan conciencia" respecto "de lo importante que es que la justicia se cumpla en términos de ejemplo y pedagogía social”.