Por tercer año consecutivo, el festival de graffiti Daking Jam reunió a cientos de artistas urbanos de 15 países se reunieron en Estación Central para pintar 3.200 metros cuadrados de murales en la comuna.

Pero este año, los murales no solo cumplen un rol visual y cultural, sino también uno ecológico: fueron pintados con el aditivo para pinturas Photio, que convierte a las superficies en purificadores de aire.

Se trata de una nanotecnología desarrollada por académicos de la Universidad de Chile, que logra degradar contaminantes ambientales a través de un proceso fotoquímico que utiliza la radiación UV natural o artificial.

La nanotecnología replica el proceso de fotosíntesis de las plantas, por lo que cada metro cuadrado pintado con el aditivo cumple la misma función que dos árboles descontaminando el medio ambiente. Estación Central tiene con estos murales el equivalente a más de 6 mil árboles nuevos.

Esta tecnología no solo se puede aplicar a murales artísticos sino que fue desarrollada pensando en el rubro minero y la contaminación existente en los túneles de las minas.

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