Juan Forch, creativo del

Juan Forch, creativo del "No": "La franja que estamos viendo es un atentado contra la democracia"

Por: Carlos Jara | 07.10.2020
"Es una franja santiaguina, e incluso de un sector social, que es de clase media para arriba", criticó Juan Forch, cuestionando además los motivos de los partidos políticos que han participado de ella. "Lo que están haciendo es una simulación de cualquier discurso que creen que les conviene", lanzó.

Casi dos semanas han pasado ya desde que se estrenó la franja en la que partidos políticos y organizaciones sociales expresan sus planteamientos a favor del Apruebo o el Rechazo, de cara el Plebiscito constitucional del 25 de octubre.

Han destacado apariciones como las de Gustavo Gatica y Jorge González, pero el resto no ha generado un alto impacto a nivel ciudadano, como lo hizo la franja del No en 1988. Prueba de esto es que a una semana de su lanzamiento, la encuesta Pulso Ciudadano sostenía que sólo un 40% de los chilenos la había visto.

Sobre esta compleja realidad conversó El Desconcierto con Juan Forch, uno de los creativos de la histórica franja del "No", y de los principales gestores de la campaña presidencial de Alejandro Guillier.

"La franja es un desastre en general. Creo que hay una irresponsabilidad muy compartida aquí por los líderes políticos, por el gobierno, por el Servel, por todos. La franja que estamos viendo -salvado casos particulares- es un atentando en contra de la democracia. Es un atentado en contra del Plebiscito, y de la nueva Constitución. Es una franja muy peligrosa", dice Forch en su descarnado análisis.

Esto, porque para el denominado "publicista de presidentes", la que tenemos hoy, es una franja en la que no sólo no se informa sobre el proceso que se avecina, sino que por el contrario, se desinforma.

— ¿Porqué crees que la franja es un "desastre"?

Todo esto nace de la actitud de los partidos políticos, e incluso, anteriormente, de este Plebiscito, que aparece de una noche aciaga de una clase política aterrada, ante un movimiento social que no entendían y que no sabían cómo reaccionar y entonces deciden plantear un Plebiscito como para buscar alguna solución que tirara la pelota a otra cancha. Y se encuentran con que la ciudadanía toma este Plebiscito y lo empieza a hacer suyo, y de alguna manera como que se los arrebata, y luego se ven en la necesidad de hacer una franja que no entienden bien para qué es y qué es lo que tiene que hacer.

Entonces nos encontramos con una franja que está llena de franjitas, con algunas bien hechas y la gran mayoría mal hechas.

— ¿Qué te pareció la distribución de los distintos movimientos sociales y actores políticos en ella?

La estructura de la franja es un absurdo. O sea, no puedes darle dos o tres segundos a nadie. Me han preguntado mucho si esto tiene algo que ver con la franja del No, y no, esto no tiene nada que ver con la franja del No. Esto se parece mucho más a las franjas de diputados, donde aparecía, por ejemplo, una 'Rosa de Aric', que ni siquiera podía decir la última 'a' de Arica. Incluso, aquí es peor porque hay algunas apariciones que tienen el puro título, entonces, la concepción misma de lo que se está haciendo es absurda, porque están tratando de reivindicar sus nombres, sus partidos, en un momento en el que la necesidad de la población, de los electores y de la ciudadanía, es otra.

— Hace unos días, Hernán Caffiero analizaba en entrevista con nuestro medio que la franja le parecía mucho más dominada por movimientos sociales que por partidos. ¿Compartes ese análisis?

Sí, en parte. El problema es cómo funciona la franja en general. Lo que está haciendo (Hernán) Caffiero me parece estupendo, pero el problema es la franja en general. Qué tan atractiva es la franja como franja para la gente, y qué tan útil es la franja para la gente. Entiendo que hay algunas piezas que están súper bien hechas, pero están dentro de un ramillete que está muy mal hecho y dentro de una estructura que no funciona.

— ¿Qué te parece que según Pulso Ciudadano sólo un 40% de la población haya visto la franja?

Como para poder opinar sobre una encuesta hay que conocer la encuesta. Yo vivo en región, y aquí la franja no está funcionando. Las regiones prácticamente no existen para la franja, que es una franja santiaguina, e incluso de un sector social, que es de clase media para arriba. Hay algunas partes de la franja que son realmente un insulto para la ciudadanía.

Este es un momento en el que la franja debió haberse dedicado entera al servicio de los ciudadanos. Tenemos un país con poca educación cívica, un país que no está demasiado interesado en general en los temas políticos por la misma acción de los políticos. Era el momento en el que teníamos que haber hecho una franja en la cual se le explicara a la gente de qué se trata esto.

— ¿La ves como una oportunidad perdida?

Pero absolutamente, es una oportunidad en la que podríamos haber hecho ciudadanía, educación cívica, participación. Porque la única manera de legitimar el Plebiscito es que la gente vote. Si la gente no vota, entonces el Plebiscito es menos legítimo. Tenemos bajo nivel de participación en las elecciones, estamos con niveles de 35% y 37%, y eso no legitima el Plebiscito. Podríamos haber aumentado esa participación. A lo mejor ni siquiera necesitábamos dos franjas, sino que una sola, si es que hubiéramos tenido políticos conscientes, decentes, y con deseos de hacer participar a la gente.

El sentido de esto no era que alguien vote por el Rechazo porque es de RN, o por el Apruebo porque es del PPD. Eso no era el sentido de esto, la Constitución no se hace así.

"Franja peligrosa"

Otra de las críticas que Forch lanzó, fue que la franja, además de ser una oportunidad perdida, es un "peligro", en la medida en que muchos de los contenidos que se emiten son derechamente falsos, o están orientados de una forma que atenta contra los procesos democráticos.

— En la franja del Rechazo se sostiene que con la nueva Constitución se pone en 'peligro el derecho a la propiedad'. ¿Qué te parecen este tipo de mensajes?

Son cosas totalmente absurdas, falsas y engañosas. De qué política y de qué políticos estamos hablando. Yo creo que eso es una vergüenza. Ahora están los evangélicos en la franja. ¿Porqué no están los equipos de fútbol? No están la regiones, no están los pueblos originarios, pero tenemos a los evangélicos por el Rechazo y por el Apruebo.

— Y, efectivamente, los evangélicos por el Rechazo han sido duramente criticados por sostener en la franja que la diversidad sexual y partidos políticos como el PC, son un "peligro" para su religión. ¿Qué opinas de que este tipo de mensajes estén en la franja?

Creo que hay una irresponsabilidad muy compartida aquí por los líderes políticos, por el gobierno, por el Servel, por todos. La franja que estamos viendo -salvado casos particulares- es un atentando en conta de la democracia. Es un atentado en contra del Plebiscito, y de la nueva Constitución. Es una franja muy peligrosa. 

— ¿Qué se pudo haber hecho para prevenir este tipo de contenidos?

Primero, creo que deberían haberse puesto en qué es lo que necesita el país. Porque si estamos hablando de que tenemos que ponernos de acuerdo en una nueva Constitución, por lo menos pónganse de acuerdo en una franja política. Pero no son capaces ni siquiera de ponerse de acuerdo en eso. Me parece un muy mal ejemplo para la ciudadanía, por ahí no va el Plebiscito.

— ¿Qué piensas de los mensajes tipo "ni de izquierda ni de derecha" en los que ha insistido la franja del Rechazo?

El Rechazo hay que asignárselo claramente a la derecha, y la derecha siempre, toda la vida, ha tenido una posición anti políticos y anti política, como una manera de hacer ellos la política con sus políticos, pero desautorizando a todo el resto. Este país ha sido gobernado por presidentes que se planteaban como apolíticos, como Jorge Alessandri, él era (supuestamente) totalmente independiente, pero en realidad era un político de derecha hablando en conta de los políticos. Ha sido lo que siempre han hecho, no me llama la atención.

— Y que RN y la UDI expresen mensajes inclusivos con los grupos sociales históricamente marginados, como inmigrantes, diversidades sexuales, o pueblos originarios. ¿Es sólo una herramienta conceptual o ves en ello una apertura honesta a otras perspectivas?

Lo que están haciendo es una simulación de cualquier discurso que creen que les conviene. Pero de ahí tu no puedes concluir ni qué es lo que piensan ni tampoco lo que van a hacer en el futuro. Esta es una franja muy mentirosa e instrumental. Para mí la mayor parte de la franja no tiene que ver con la realidad, ni con la ideología, ni con el pensamiento de quienes están ahí.

Revisa a continuación la entrevista completa:

https://www.youtube.com/watch?v=aEVBUszdOcM