Hermano de Gustavo Gatica:

Hermano de Gustavo Gatica: "Ha sido increíble la poca voluntad de las autoridades de no escuchar en todo este tiempo"

Por: Meritxell Freixas | 13.11.2019
El Desconcierto conversó con Enrique Gatica, de 29 años e investigador de doctorado en Historia, quien desde el primer día ha acompañado a su hermano y por primera vez, como representante de la familia, conversa con la prensa sobre el estado de salud del estudiante, su mirada de la contingencia desde la Clínica y cómo proyecta su futuro a partir de ahora.

La historia de Gustavo Gatica, el estudiante de Psicología de la Universidad Academia de Humanismo Cristiano, de 21 años, que ha sufrido un trauma ocular bilateral severo que podría dejarlo sin visión, ha conmocionado a la sociedad en los últimos días. Los hechos ocurridos la tarde del viernes 8 de noviembre son ampliamente conocidos.

El joven, de la comuna de Colina, estaba en los alrededores de Vicuña Mackenna con Plaza Italia sacando fotografías y participando de las movilizaciones cuando le llegaron dos proyectiles que hirieron gravemente sus dos ojos. El INDH se ha querellado por su caso y ha solicitado al tribunal que Carabineros no pueda acercarse a Gatica, lo que fue acogido por el juez Darwin Bratti. "Los hechos denunciados en la querella son de especial gravedad, los cuales podrían constituir violaciones a los Derechos Humanos perpetrados por agentes del Estado", argumentó el magistrado.

Cuatro días después de ese fatídico viernes, El Desconcierto conversó con el hermano mayor de Gustavo, Enrique Gatica, de 29 años e investigador de doctorado en Historia. Desde el primer día ha acompañado a su hermano y por primera vez, como representante de la familia, conversa con la prensa sobre su estado de salud, cómo vive la contingencia desde la Clínica y cómo proyecta su futuro a partir de ahora.

-¿Cómo se encuentra Gustavo?

-Por ahora, no ha habido mejoras de la situación de gravedad y la verdad es que no podemos tener muchas expectativas de que vaya a recuperar la visión. Por ahora, aún no se han podido extraer los proyectiles de sus ojos, pero lo que se intenta es tratar de evitar mayores daños. A nivel psicológico, ha estado bien acompañado y tiene una actitud positiva. Está bien dentro de lo complejo y grave de la situación.

-¿Se sabe cuándo será la operación que está pendiente?

-El equipo médico nos ha dicho que la próxima intervención no conviene que sea tan rápida. Además, lo más probable es que no sea la única. Después de esta segunda van a tener que venir más. Pero todo se irá viendo sobre la marcha, según como vaya evolucionando. Todavía no sabemos en qué fecha que podrá salir de la clínica, lo más probable es que sea en unos días más, pero también se evalúa la posibilidad de descansar en la casa hasta la próxima intervención.

-¿Qué tipo de asistencia recibe su hermano?

-Hemos juntado varios apoyos: del Colegio Médico que prontamente se ha acercado, el Colegio de Oftalmólogos también nos ha dado asistencia y ha conversado con nosotros y también han venido equipos de psiquiatras y psicólogos a acompañar a Gustavo y a la familia. También hemos recibido mucho acompañamiento de la Clínica y de la Academia de Humanismo Cristiano.

-¿Y ustedes, como familia, cómo están?

-Esto ha sido muy difícil, ha sido como un vaivén para todos. Ha habido momentos en los cuales nos hemos sentido más abrumados, y otros en los que hemos recibido harto acompañamiento. Esto nos ha permitido subir el ánimo y estar más tranquilos. Gustavo tiene una fortaleza muy grande y eso ha quedado en evidencia en este período. Pese a la gravedad de la situación, de la cual es muy consciente, mantiene un ánimo bastante positivo y un espíritu fuerte.

-¿Cómo enfrentan la gestión de la nueva situación?

Por partes y de a poco. Hemos ido conversando algunas cosas. La Universidad ha mostrado disposición total y absoluta de que Gustavo retome sus estudios cuando pueda. Gustavo tiene esa actitud, no se ha tirado para abajo. Si bien su vida cambia a partir de ahora, y él lo sabe, tiene toda la disposición para seguir adelante y continuar sus estudios. Él tiene herramientas y una forma particular de manejar las situaciones de crisis. Siempre ha tenido un perfil de psicólogo, muy dialogante, sabe afrontar las situaciones de forma madura y tiene una actitud muy resiliente. Es lo va ayudar en estos momentos.

[caption id="attachment_324186" align="alignnone" width="900"]gustavo gatica / Agencia Uno[/caption]

"Gustavo espera que se mantenga la movilización"

-En las últimas horas se han producido varios hechos relacionados con las críticas por las numerosas lesiones oculares: se ha pronunciado la ONU, el Colegio Médico, se ha presentado un proyecto de ley para prohibir los disparos de proyectiles, han habido declaraciones de Carabineros referidas a “acotar” el uso de escopetas… ¿Cómo valoran todas estas reacciones?

-La gravedad de lo ocurrido con Gustavo hace necesario que haya un impacto de lo que está pasando. Gustavo nos ha manifestado que eso no puede seguir ocurriendo. Para la familia es muy doloroso que se convierta en un caso simbólico, pero es necesario que así sea. Desde que pasó eso [su lesión], Gustavo planteó que estos hechos no se pueden repetir. Aplaudimos estos proyectos e iniciativas porque el caso de Gustavo es dramático, pero hay más de 200 jóvenes con daños oculares. Ni siquiera en zonas de conflicto bélico, de ocupación militar como Palestina, hay cifras comparables. ¿Cómo es posible tener estas cifras en un Estado que está en democracia? Una democracia que podríamos empezar a cuestionar por la manera represiva de actuar contra la sociedad civil. El caso de Gustavo es uno de tantos otros, quizás es el más dramático, pero hay muchos jóvenes que como él están en una situación muy compleja.

-A veces pasa que las respuestas o reacciones llegan cuando ya hay una víctima, que acaba convertida en símbolo.

-Totalmente. El Colegio de Médicos y de Oftalmólogos empezaron a avisar al Ministerio de Interior desde el caso 29, y esa cifra ya era brutal. En cuatro semanas, las cifras son aberrantes. Que ahora Carabineros mencione que se usarán los disparos cuando sea estrictamente necesario hace pensar. Entonces, ¿antes no se usaba en momentos estrictamente necesarios? Hay una contradicción muy grande entre los anuncios –que no han sido tan concretos– y su actuar. Ha sido increíble la poca voluntad de las autoridades de no escuchar en todo este tiempo.

-¿Han recibido alguna llamada o comunicación de Carabineros para interesarse por el estado de salud de Gustavo?

-No, ninguna. Tampoco de las autoridades del Gobierno.

-¿Y diputados?

-Sí, hemos tenido acercamiento con parlamentarios de oposición que han venido y hemos conversado con ellos. Entendemos que tienen que haber cambios políticos.

-¿El jefe de Carabineros, Mario Rozas, dijo que han “identificado” a los funcionarios que dispararon a su hermano?

-Nos llegó la noticia pero no tenemos mayores detalles. De la investigación que se está haciendo desde Fiscalía no nos han dado detalles de esto. Nos enteramos por la prensa, cuando una amiga me mandó un pantallazo de la noticia, porque nosotros no sabíamos nada.

-Hay un informe que presentó hoy el Hospital de El Salvador que revela que las balas son “de goma a primera vista” pero que en las tomografías computadas (TC) “se observa como un objeto metálico en vez de goma“. ¿Gustavo ha dado algún detalle sobre el tipo de proyectil que recibió?

-No, no tiene detalles de esto y como todavía no han sido extraídos [los proyectiles], no han podido ser estudiados. No sabemos con exactitud.

-A nivel judicial hay querella interpuesta por el INDH y otra que interpondrán los ex fiscales Gajardo y Pablo Norambuena. ¿Cuál es la intención de la familia a nivel judicial?

Recién estamos empezando a ver esto. Lo primero sería identificar al funcionario, pero también interpelar a las autoridades responsables. Como familia somos muy conscientes que alguien aprieta el gatillo, pero hay protocolos que no se están respetando y hay una pasividad frente a acciones que no se han revertido. Ya ha habido muchas alertas desde los primeros casos y esta práctica sigue de manera sistemática, porque además han habido más personas después del caso de Gustavo con lesiones oculares. No ha habido un cambio. Es importante reconocer las responsabilidades de la institución de Carabineros y del Estado.

-¿Se refiere al Ministerio del Interior?

-Sí, el Ministerio de Interior es el encargado de la seguridad del Estado, sería lo más lógico.

-¿Qué opina Gustavo del momento que atraviesa el país?

-Gustavo es un joven con mucha conciencia social, muy participativo. Está muy pendiente de la coyuntura política, es algo que compartimos. Desde que empezó el estallido social él participó en las manifestaciones tomando fotografías, comparte los ideales de una sociedad más justa y reconoce la indignación con la injusticia que ocurre en Chile. Está muy consciente y muy claro del por qué participaba de las manifestaciones tanto en la comuna como en Plaza Italia. Sigue atento a lo que ocurre porque yo le voy contando las noticias y él espera que se mantenga la movilización y que se logren cambios. Quiere democratizar este país y que haya más justicia social.

-¿Está por una nueva Constitución, también?

-Sí, y de una manera genuinamente participativa. No sirve de nada si está firmada por los mismos que han hecho oídos sordos a la gente. La nueva Constitución tiene que nacer desde la ciudadanía, desde la sociedad civil.