Más de 400 muertos y casi 4.000 heridos: El balance que dejó hasta ahora el terremoto en frontera entre Irak e Irán

Más de 400 muertos y casi 4.000 heridos: El balance que dejó hasta ahora el terremoto en frontera entre Irak e Irán

Por: El Desconcierto | 13.11.2017
El presidente iraní, Hasan Rohaní, visitará en las próximas horas la región, a la que ya se desplazó una delegación encabezada por el ministro del Interior del país.

La cifra de víctimas del fuerte terremoto de 7,3 grados en la escala de Richter que sacudió anoche la provincia de Kermanshah, en el oeste de Irán, aumentó este lunes a 402 muertos y unos 3.950 heridos, según los últimos datos oficiales.

Las autoridades iraníes movilizaron a todos los cuerpos de seguridad para acelerar las tareas de rescate y de retirada de escombros en las poblaciones más afectadas por el sismo.

En las operaciones de búsqueda participan el Ejército, los Guardianes de la Revolución, la fuerza de Voluntarios Islámicos y la Media Luna Roja de Irán. Sobre el terreno están desplegadas también unas 140 ambulancias y miles de efectivos de los servicios de emergencia y otras organizaciones gubernamentales.
Las autoridades estblecieron hospitales de campaña para atender las urgencias y para ayudar a los centros médicos de las localidades más cercanas, que están colapsados.

Los daños son por ahora difíciles de cuantificar debido a que las comunicaciones han estado cortadas y a que algunas carreteras permanecen bloqueadas impidiendo el acceso a las zonas más montañosas damnificadas.

El presidente iraní, Hasan Rohaní, visitará en las próximas horas la región, a la que ya se desplazó una delegación encabezada por el ministro del Interior, Abdolreza Rahmani Fazli.

El epicentro del seísmo se produjo a las 21.18 hora local del domingo cerca de la ciudad iraquí de Halabya, en la región del Kurdistán, fronteriza con Irán, a una profundidad de 33 kilómetros.

Las numerosas réplicas, algunas de 4,5 grados, se sintieron en varias provincias del norte, oeste y centro del país, incluida la capital Teherán. También en otros países de Medio Oriente, como Israel, sintieron una fuerte sacudida.