Jorge Rosenblut, presidente de Enersis, el holding a través de la cual Endesa España controla sus empresas en el mercado eléctrico latinoamericano, figura involucrado en un nuevo caso de financiamiento irregular de campañas políticas.

Según consigna El Mostrador,  Rosenblut habría realizado pagos a las campañas presidenciales de Eduardo Frei en 2009 y Michelle Bachelet en 2013 a través de sus respectivos recaudadores: Pedro Yaconi, en el caso del decé, y Giorgio Martelli, en el caso de la hoy Presidenta socialista.

Los aportes habrían sido efectuados fuera de la ley y significado, al menos, $100 millones para Frei vía Yaconi y $50 millones a Bachelet vía Martelli.

La situación se hizo pública luego de que en marzo pasado el director independiente de la eléctrica, Enrique Cibié, solicitara una auditoría interna a Endesa. Por lo anterior, su filial Enersis encargó la revisión de todas sus filiales y su relación con el financiamiento de la política, tanto fuera como dentro de la ley.

En abril, durante la última junta de accionistas de Endesa Chile, el gerente de Finanzas Ramiro Alfonsín reconoció aportes a la campaña presidencial de 2013: “En 2013 sí se hizo un aporte a la campaña presidencial, dentro de lo que establecen las normas respectivas. El aporte fue de US$ 1 millón”, señaló Alfonsín según La Tercera.

Pero esta no es la primera aparición de Jorge Rosenblut en financiamiento de campañas políticas. A mediados de abril reconoció haberse reunido con el ex gerente general de SQM, Patricio Contesse, para pedir financiamiento de la empresa del yerno de Pinochet a la campaña presidencial de Bachelet en 2013.

Endesa Chile fue consultada por La Tercera sobre la existencia de la auditoría interna solicitada por Cibié, a lo que la empresa respondió: “Dentro del marco general de revisiones habituales que efectúan la compañías del holding, en directorio de Endesa Chile el mes de marzo pasado se solicitó una revisión particular sobre contrataciones de servicios a personas conexas a Personas Políticamente Expuestas (PEP), la que se encuentra en etapa de desarrollo”.

La revisión, agregaron, no tiene “mayores conclusiones al respecto”, pero después “de contar con toda la información requerida”, la empresa analizará la información y tomará “las decisiones que correspondan”.