Era lunes por la mañana en la capital y barricadas se tomaban las calles de Quilicura. En Avenida Las Torres con Lo Ovalle, varios vecinos del sector se aglutinaron junto al fuego de las llantas para hacer sonar sus cacerolas. ¿La razón? 72 horas sin suministro eléctrico para cientos de familias.

Barricadas en Quilicura: Av. Las Torres con Lo Ovalle. Reclaman pérdidas económicas y nula respuesta de @EnelClientesCL @Cooperativa pic.twitter.com/kfdok6xfjk

— Francisco Becerra (@panbecerra) 18 de junio de 2017

Se estima que 71 mil personas a lo largo de todo el país iniciaron la semana a oscuras. Desde la Región Metropolitana hasta La Araucanía, se repetía la misma imagen. Los cortes llegaron el fin de semana, algunos incluso el jueves.

"Han sido días complejos para la industria", salió a reconocer ayer Herman Chadwick Piñera, presidente de Enel, la distribuidora del suministro eléctrico en la Región Metropolitana. Esta empresa -ex Chilectra- y la otra gran distribuidora, CGE -que tiene a 3 de sus ejecutivos en prisión preventiva por los incendios del verano pasado- han sido sindicadas como las grandes responsables, ante el enojo de la ciudadanía afectada y las duras críticas de las autoridades.

Por ley, ambas compañías arriesgan sanciones de hasta $5.600 millones si es que estima que tuvieron responsabilidad en los cortes.

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Sin luz

Más de 100 mm de agua y vientos de hasta 70 kilómetros por hora fue lo que se vivió a fines de la semana pasada en la región Metropolitana, producto del sistema frontal. Y esta es la razón, según salió a explicar Chadwick Piñera ayer, de los cortes. "Lamentamos profundamente los inconvenientes vividos por nuestros clientes este fin de semana, producto del violento frente de lluvia y viento que afectó a la Región Metropolitana y a gran parte del país. Durante estos días hemos mantenido nuestra máxima capacidad operativa de atención de terreno para recuperar la totalidad de los casos y retornar cuanto antes a la operación normal", declaró a la prensa el presidente de Enel Distribuidora.

"Comprometemos también nuestra mejor disposición para asumir las compensaciones que pudieran corresponder atendiendo caso a caso los requerimientos de los afectados", agregó.

La situación no le saldría barata a la industria. La ley establece que la Superintendencia de Electricidad y Combustibles (SEC) puede ejercer sanciones de hasta $5.600 millones de pesos después de una investigación de los cortes de energía. "Es inaceptable que existan familias que aún permanezcan sin energía eléctrica, luego del sistema frontal que ya pasó por la zona centro sur del país. Por lo mismo, aplicaremos las máximas sanciones que contempla la normativa, si es que se comprueba que ellas tuvieron responsabilidad en la demora en la reposición del servicio", comentó ayer el superintendente de la SEC, Luis Ávila Bravo.

Días después del paso del sistema frontal, más de 15 mil personas en el Maule seguían sin suministro eléctrico, por ejemplo. Comidas a la basura y negocios cerrados fueron la tónica de estos días.

"Las empresas tienen la obligación de adoptar todas las medidas necesarias para evitar los cortes de suministro. Y cuando éstos se producen, deben redoblar sus esfuerzos para recuperar, a la brevedad, el servicio, ya sea aumentando sus cuadrillas de emergencias en terreno y también sus equipos de call center, a fin de recibir las denuncias de sus clientes", agregó Ávila, en relación a las constantes fallas que sostuvieron las empresas en sus sistemas telefónicos. La gente, molesta por la situación, ni siquiera podía comunicarse con la compañía para reclamar.

El Servicio Nacional del Consumidor (Sernac) tampoco le tiene buenas noticias a las empresas eléctricas. Ayer ofició tanto a Enel como a CGE a que expliquen, con un plazo mínimo de 10 días, las causas de los cortes que empezaron el pasado viernes. Además, llamaron a los usuarios que siguen sin suministro a presentar un reclamo en los organismos correspondientes para acelerar la reposición del suministro.

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Todo queda en familia

Herman, el presidente de Enel que tuvo que dar explicaciones por el corte, es hermano de Andrés Chadwick Piñera, ex ministro y "generalísimo" de la campaña del primo, el ex presidente Sebastián Piñera.

La cabeza de la empresa eléctrica también es padre de María Irene Chadwick, ex jefa de programación de la presidencia durante el gobierno de su primo y de Herman Chadwick Larraín, el síndico de quiebras que está implicado en el caso Caval.

Herman Chadwick Piñera tuvo un breve paso por la alcaldía de Providencia, designado por Pinochet en plena dictadura. Después, volvería a incursionar en política como concejal por Santiago en 2002. Lo suyo, sin embargo, son los negocios.

Consejero de la Sofofa, Herman Chadwick es también director de Aguas Andinas, IAM, Viña Santa Carolina y vicepresidente de Intervial, además de ser un fructífero empresario de las carreteras, con presencia en las concesionarias de las Rutas del Maipo, Maule, del Bosque, de la Araucanía y de los Ríos.

En 2010 fue nombrado por su primo como presidente del Consejo Nacional de Televisión (CNTV), cargo en el que se mantuvo durante todo el gobierno de Piñera. A su actual posición llegó en 2015, tras ser nombrado miembro del directoria de Enersis en reemplazo de Carolina Schmidt, otrora ministra de Educación de Piñera.