Seis ex altos mandos de Carabineros cuentan con asignación vitalicia para financiar sus automóviles, chofer, bencina y tags vitalicios. Todo, en virtud de un decreto reservado de 1998.

Solo entre 2015 y 2017, la institución desembolsó más de $75 millones en combustible, un monto que permite cruzar Chile desde Arica a Punta Arenas en casi 30 ocasiones. El beneficio es asignado por el general director en ejercicio para proporcionar, con cargo a sus propios recursos institucionales, "medidas de protección y seguridad para quienes hayan ejercido el mando superior de Carabineros de Chile".

Así lo informó La Segunda tras información obtenida gracias a la Ley de Transparencia: las medidas contemplan la asignación de un automóvil que cuente con las características necesarias "para brindar seguridad", además de un conductor personal para cada uno, financiamiento de combustible, tag, seguros, reparaciones y mantenimiento de los mismos. En total, más de 83 millones de pesos considerando solo estos gastos en los últimos dos años.

Desde la institución argumentaron que estos acuerdos se basan en un decreto de la entonces Subsecretaría de Guerra -actual Subsecretaría de FF.AA.- que data de 1998 y que tendría carácter de "reservado".

Uno de los aspectos llamativos es que los usuarios de estos beneficios son ex autoridades de larga antigüedad, como Rodolfo Stange -último comandante en jefe de la dictadura-, Fernando Cordero, Manuel Ugarte, Alberto Cienfuegos, Gustavo González Jure y Eduardo Gordon, quien será formalizado próximamente por malversación de caudales públicos. Según el informe, no existe limitación para los beneficios, ya que Stange, por ejemplo, dejó su cargo hace más de veinte años.

Los automóviles usados por los ex generales no son de bajo perfil: entre ellos, cinco Volkswagen Passat Luxury 2.0 (2015), avaluados en 13 millones de pesos cada uno y un Hyunday Santa Fe GLS (2000), que supera los 7 millones.