"El señor Jovino Novoa es el principal accionista del proyecto eléctrico Osorno y Los Lagos. Sabía usted que desaparecerá flora y fauna nativa", publicó ayer domingo en su Twitter Pancho Saavedra, generando una serie de reacciones en la red social.

https://twitter.com/PANCHOSAAVEDRA/status/868898435969187842

El conductor del reconocido programa de Canal 13, Lugares que hablan, se refería a la Empresa Eléctrica Pilmaiquén S.A., que se encuentra desarrollando 3 importantes proyectos hidroeléctricos en la zona: La central Rucatayo, en las cercanías de Osorno, y los proyectos Central Los Lagos y Central Osorno.

Aunque si bien el ex senador de la UDI Jovino Novoa tuvo una participación mayoritaria en Pilmaiquén S.A. -a través de su compañía de inversiones Río Bueno S.A.-, esto cambió a fines del año 2015, cuando la transnacional noruega Statkraft compró el 98% de la compañía en más de 150 mil millones de pesos.

Statkraft es de las principales empresas hidroeléctricas en el mundo y en Chile opera además con las centrales La Confluencia y La Higuera.

Pilmaiquén era una empresa estatal que fue privatizada en dictadura. Entonces quedaron como directores personajes como el empresario Bruno Philippi Irarrázabal, presidente de AES Gener y Hernán Büchi, ex ministro de Pinochet y director de varias empresas. Estos se desligaron tras la venta a la empresa noruega.

Las actividades de Pilmaiquén S.A. han sido duramente repudiadas por las comunidades de las zonas donde ha intervenido. Vale aclarar que al momento de la compra, básicamente heredó los proyectos avalados anteriormente por los organismos estatales, como el decreto que le otorgó la concesión hidroeléctrica a la Central Osorno.

Este mismo, sin embargo, ya caducó al no iniciarse las obras en el plazo estipulado, aunque todavía puede apelar a la extensión de este.

En la zona se ha cuestionado el rol de Pilmaiquén S.A., específicamente por haber pasado sus estudios de impacto ambiental asegurando que no habían comunidades indígenas en la zona, cuando afectaba directamente a un pueblo aledaño a la central Osorno y a la morada del Ngen Kintuane, un sitio sagrado para los huilliches que habitan por la ribera del río Pilmaiquén.

Además, desde las comunidades denunciaron la no aplicación del convenio 169 de la OIT al que Chile está suscrito, relativo a la consulta indígena.